Entre los días 18 y 25 de este mes de Enero, hemos pasado unas agradables vacaciones en familia, en el balneario de Los Vilos. Los Vilos es un pueblito costero de la cuarta región que está ubicado a 225 kilometros de Santiago hacia el Norte.
Gracias a Dios, hemos podido tener una semana de merecido descanso después de un largo año de trabajo. A diferencia de otras oportunidades, en esta ocasión se reunió casi toda la familia y hemos podido pasar unos días muy entretenidos con hijos y nietos. Por supuesto los más contentos fueron los niños, ya que disfrutaron de la arena, el sol y el mar y todos los comestibles que venden en la playa.
Para dar mayor felicidad al grupo, el tiempo estuvo espectacularmente bueno, por lo que todos los días pudimos ir a la playa tanto en la mañana como en la tarde.
Una que disfrutó mucho fue la "Rita", quien salió todos los días temprano en la mañana a caminar por la playa y correr como no lo puede hacer en la casa.
Ahora el ánimo está excelente, el cuerpo descansado, la mente preparada para comenzar un nuevo año de trabajo, ojalá muy productivo y la salud muy bien. Si todo lo anterior se junta y responde al máximo, este debe ser un buen año 2006.
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